sábado, 28 de julio de 2018

La isla de Alice



La primera novela de este director de cine ha demostrado que es un gran escritor y no solo de guiones. Este libro es una maravilla, digna del mejor guión de cine, de una belleza suprema. La historia atrapa desde las primeras líneas y te mete tanto en su historia que puedes ver claramente los parajes y colores que enmarcan esta novela.
Alice vive una vida perfecta. Con una hija de seis años y otra a punto de nacer, ella y Chris son el matrimonio perfecto: se aman, se adoran, se respetan. Una vida ideal. Pero todo cambia en el momento en que Chris sufre una accidente de tráfico donde fallece y la vida de Alice cambia para siempre. Aunque lo más sorprendente para ella en esos duros momentos es descubrir que Chris tiene el accidente en dirección contraria a donde debería encontrarse. Qué hacía Chris en esa carretera y porqué ella no sabía nada, se convierten en su máxima obsesión.
Es el tratar de conocer qué era lo que estaba pasando lo que le lleva a Alice a un rastreo exhaustivo de los viajes de Chris. Para ella es también una forma de superación de este duro trance, cree que a través de la verdad podrá empezar de nuevo una nueva vida. Así es como llega hasta una pequeña isla llamada Robin Island, un lugar muy pequeño donde todos se conocen y por lo tanto donde podrá obtener muchas respuestas. Pero, ¿realmente quiere conocer la verdad? ¿Por qué le resulta tan difícil preguntar directamente qué hacía Chris en la isla?
Alice se convertirá en la mayor espía nunca vista. Será madre a tiempo completo con sus dos hijas pero a la vez no dejará de observar y perseguir a sus nuevos vecinos tratando de encontrar respuestas. Su vida era perfecta y ahora es una viuda, con dos hijas muy pequeñas y con un secreto escondido con el que espera descubrir qué es lo que llevó a Chris a viajar a la isla durante casi tres años.
Este duro viaje será también un periodo de superación para ella porque encontrar la verdad no es fácil y aunque esté al alcance de su mano o de una simple preguntar a la persona adecuada, tampoco sabe si es eso lo que quiere. Dejar a Chris marchar será lo más duro a lo que tengan que enfrentarse.
Esta novela es preciosa, tuve que dejar de leer el final porque las lágrimas me impedían seguir leyendo. Llegar al final y al descubrimiento del misterio es algo que, como Alice, no sabe si quieres que llegue.
Próxima lectura: 2065, de José Miguel Gallardo.

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