miércoles, 19 de noviembre de 2014

Billar a las nueve y media



Intenso este escritor alemán, premio Nobel de Literatura y muy intensa su obra, sus descripciones, sus pensamientos y narraciones. Gran novelista que recibió el premio gracias al impulso que a través de sus novelas potenció de nuevo la literatura alemana. Es la suya una literatura de posguerra, tremendamente pesimista y desgraciada.
En este libro nos encontramos con tres generaciones de arquitectos pero de muy diferente índole cada uno de ellos. El abuelo consiguió su gran prestigio gracias a que ganó un concurso para la construcción de una Abadía. Esto supuso su salto definitivo, que fuera conocido por todos y le abrió las puertas a otros muchos proyectos. Gran constructor, su vida estuvo marcada por esta obra. Al hijo, en cambio, le toca vivir en el contexto de la Segunda Guerra Mundial y en ella a lo que se dedica principalmente es a destruir: casas, puentes, carreteras, iglesias... Entre ellas la gran obra de su padre. Y el nieto a lo que se dedicará es a la reconstrucción de todas las destrucciones de la Guerra, incluida la gran obra del abuelo y atormentado por saber quién fue el que la destruyó.
La novela está repleta de reflexiones personales, tanto de los principales protagonistas como de los que les rodean. Los conocemos a través de lo que piensan y de lo que sienten, sin mucho diálogo entre ellos.
Novela muy descriptiva de los momentos duros que sufrió Alemania tras las guerras en las que fue protagonista. Refleja muy bien la pesadumbre y tragedia que les acompañó durante esos años.
Próxima lectura: El filo de la navaja, de William Somerset Maugham.

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